Arabia Saudí: el ‘diamante’ de la moda pierde brillo entre la inestabilidad y los precios del petróleo
El diamante de la moda internacional no brillaba tanto, después de todo. Arabia Saudí, el mayor mercado de Oriente Próximo, se había convertido en uno de los mercados seguros en los planes de expansión de las compañías de moda, de pymes de precio medio a grandes conglomerados de lujo. Pero, en los últimos años, el mercado ha comenzado a deslucirse lastrado por los precios del petróleo, del que tiene una gran dependencia, la entrada en vigor de nuevas regulaciones y la inestabilidad política en la región.
Arabia Saudí es uno de los países con mayor Producto Interior Bruto (PIB) per cápita del mundo, con 54.500 dólares en 2017, y es el estado más poblado del Golfo, con 33 millones de habitantes. El gasto per cápita en moda se sitúa también en un rango elevado, de 500 dólares al año, según datos recogidos por McKinsey.
Sin embargo, su dependencia del petróleo hace que su economía, y también el consumo privado, esté altamente expuesta a la fluctuación de los precios del petróleo, que tocaron mínimos el año pasado.
Para estimular la economía, el gobierno ha puesto en marcha un paquete de medidas que incluyen desde megainfraestructuras como Diriyah Gate, con 7,1 millones de metros cuadrados, o The Red Sea Project, que tendrá catorce hoteles de lujo. Además, desde este año los comercios pueden abrir las 24 horas pagando una tasa de 23.860 euros.
Al contexto económico se suma la inestabilidad geopolítica en la región, avivada el año pasado con el ataque yemeníes a unas instalaciones petrolíferas en el país. Arabia Saudí estuvo también en el centro de la polémica por su presunta vinculación con el asesinato del periodista Jamal Khashoggi en el consulado del país en Estambul (Turquía).
En paralelo, el retail se enfrenta a sus propios desafíos. Aunque las rentas han bajado, los costes laborales han subido aupados por las nuevas tasas administrativas y la reducción de los subsidios a la energía.
El consumo minorista en Arabia Saudí ha desacelerado en el último año
En septiembre del año pasado, además, el gobierno comenzó la llamada “Saudización”, una medida que obligaba a las tiendas de ropa, automóviles, muebles y utensilios para el hogar a que el 70% de sus empleados fueran nacionales saudíes.
Según los últimos datos de la General Authority for Statistics Saudi, en 2017 el retail de ropa, calzado y artículos de piel retrocedió un 1%, hasta 26.762 millones de riales saudíes (6.417 millones de euros).
En su conjunto, el comercio minorista en el país también ha desacelerado, dejando atrás las tasas a doble dígito que asombraban al mundo hace sólo unos años. En el primer trimestre de 2019, las ventas de retail retrocedieron un 0,5% y en el segundo trimestre se elevaron apenas un 5,2% en relación al mismo periodo del año anterior.
“En los últimos años ha habido un incremento notable en los cierres de compañías, especialmente en los sectores de wholesale y retail”, explica McKinsey en un artículo publicado el pasado diciembre. “Sólo funciona el lujo más extremo o el low cost, las compañías de gama media no tenemos espacio”, explica un directivo del sector.
“Ha habido un incremento en cierres de compañías de ‘wholesale’ y retail”, dice McKinsey
Aunque son pocas las empresas de retail de la región que coticen, las que sí hacen públicos sus resultados han empeorado sus magnitudes. Es el caso de Alhokair, franquiciado de Zara o Banana Republic en el país, que entró en pérdidas en el segundo trimestre del ejercicio en curso (finalizado el pasado septiembre) tras llevar a cabo un proceso de “optimización” de su red de tiendas y “finalización de acuerdos”, aunque no precisó cuáles. En el tercer trimestre, la compañía volvió a engordar sus pérdidas, pese elevar su beneficio.
En cambio, el sector sí continúa creciendo en la Red. La penetración de Internet en Arabia Saudí llega al 89%, frente al 57% de China, y el peso de este canal en algunas categorías de moda llega ya al 20%. En este contexto, son varios los operadores que han tomado posiciones en la región, como Amazon, Farfetch, Jollychic o Yoox-Net-a-Porter, que compiten con operadores locales como Namshi, The Modist y Ounass.