“Aunque nos venzan las ganas de hacer cosas, tenemos que esperar y ver qué pasa”. Javier Vello, socio de EY responsable de las áreas de consumo y retail, dice que es mejor pararse a pensar antes de actuar por que las “recetas convencionales en situaciones de crisis habituales no son aplicables ahora”. El ejecutivo sostiene que las primeras medidas que ha tomado el sector son las correctas y que las empresas deben centrarse ahora en “preservar al máximo el valor de la compañía”. ¿Qué hacer cuando todo haya pasado? “Un replanteamiento integral de mi negocio, como si empezara de cero”, sostiene.

Pregunta: Descríbame la situación que estamos viviendo.

Respuesta: Centrándonos en el sector, el impacto es grande. Tener cerradas las tiendas, aunque se busquen mecanismos para amortiguar la situación, la pérdida de ingresos en un periodo cercano a Semana Santa y con el lanzamiento de la colección primavera verano, no es una buena noticia. Estamos en un tenso impás de ver cuánto tiempo se mantiene la situación. Mi mayor miedo son las empresas de tamaño pequeño que estaban en un proceso de reestructuración: es un tsunami que se puede llevar por delante el middle market.

P.: Reflejo, táctica y estrategia. ¿Cuál debe ser el reflejo automático de las empresas?

R.: El reflejo lo han tenido ya todas las empresas: cerrar las tiendas y minimizar los gastos. Ahora se trata de ver cómo conservo el máximo de valor y minimizo el impacto. Todos los gestores han obrado como debían obrar. Lo único que se puede hacer en estos momentos es preservar al máximo el valor de la compañía, es decir, una compañía tiene unas necesidades de caja para operar, si no entran ingresos hay que minimizar al máximo los costes. Los tres grandes gastos de una empresa de moda son producto, alquileres y empleados, y el producto ya lo tienes comprado… Tras los expedientes de regulación de empleo que se presentan ya, sobre la mesa está ahora una moratoria de alquileres. En centro comercial es hablable, en calle habrá que hablarlo también.

P.: Después llegaría la táctica para pasar la crisis. ¿Qué recomendaría?

R.: Todavía es pronto para ver el impacto y hay que esperar a ver cómo se aterrizan las ayudas por parte del Gobierno. Todo lo que sea enfocarse a minimizar costes innecesarios y plantear alternativas de inversiones no necesarias es fundamental. Esto es lo que habría que hacer en una situación normal, pero no se sabe cuánto va a durar.

“Aunque nos venzan las ganas de hacer cosas, tenemos que esperar y ver qué pasa”

P.: Y llegará la fase de la estrategia. ¿Es pronto para plantearla?

R.: Es pronto para ver cómo va a impactar en cada empresa. Recetas convencionales en situaciones de crisis habituales no son aplicables ahora. Aunque nos venzan las ganas de hacer cosas, tenemos que esperar y ver qué pasa. Dibujar un escenario hoy es complicado: habrá que usar la mejor imaginación y la máxima energía para salir de esta.

P.: Dia 1 después de la crisis. ¿Qué hacemos?

R.: Reflexionar sobre mi cartera de tiendas, qué vendo, qué no, sobre mi cliente… Un replanteamiento integral de mi negocio, como si empezara de cero. Me lo replantearía todo.

P.: ¿Qué cambios más grandes ve en el negocio de la moda?

R.: Es un sector que va a tener que pensar cómo ser más ágil. No puede depender tanto de una cadena de aprovisionamiento tan larga, de unos tiempos tan largos… La moda debe hacerse mucho más flexible, debe replantear los puntos de venta, pero también la producción sobre demanda.

P.: Concentración, reorganización del parque de tiendas, revalorización de la moda eran deberes pendientes del sector. ¿Esta situación acelerará la transformación?

R.: Esta situación es un acelerador dramático. Van a cambiar demasiados fundamentales del negocio.

Más de 300 millones de euros. Este es el impacto que podría tener la crisis del Covid-19 en el sector del diseño español de moda, según una estimación de la Asociación Creadores de Moda de España (Acme).

Sólo en marzo, las empresas asociadas dejarían de ingresar hasta noventa millones de euros por “las grandes dificultades para producir, la paralización de ventas, los pedidos cancelados y el cierre de comercios”, apunta la asociación.

Entre marzo y junio, el cuatrimestre de mayor actividad del año junto a la campaña de Navidad, los ingresos podrían disminuirse en 360 millones de euros. Además, Acme subraya que “eventos de gran relevancia para el sector” se han visto obligados a retrasar su edición, como Valmont Barcelona Bridal Week, y las ferias internacionales experimentaron una caída de compradores.

Acme prevé una caída de los ingresos de noventa millones sólo en marzo

Para Modesto Lomba, presidente de Acme, “esta situación debe invitarnos a reflexionar y hacernos pensar en los errores que hemos cometido como país y como sector”. “El futuro puede depararnos más episodios como este y debemos estar preparados”, añade.

“No se trata de una crisis anecdótica, por lo que es muy importante que protejamos nuestra industria del mismo modo que ya se hace en otros ámbitos y en otros países”, sostiene Lomba. El presidente de Acme defiende que “hay que tener un plan B y trabajar en el futuro con la lección aprendida, y cerrar filas alrededor de otros sectores productivos como el de la confección, lo que nos permitiría ser más autosuficientes y aislarnos sin estas graves consecuencias económicas”, concluye.

Para Pepa Bueno, directora ejecutiva de Acme, “es momento para la innovación, para pensar y tratar de reinventar los discursos, los procesos y ofrecer a los consumidores nuevos valores”. “Habrá que desarrollar un a política de estímulos y un plan de incentivos”, añade.

Otra compañía del negocio de la moda presenta un expediente de regulación temporal de empleo (Erte). El grupo gallego Bimba y Lola, controlado por la familia Domínguez, ha anunciado esta tarde la presentación de esta medida, que afectará a todo el personal de sus tiendas en España. La empresa no ha precisado el número de trabajadores.

“Es una medida por causa de fuerza mayor, que se produce tras el cierre provisional de los 206 puntos de venta que la compañía tiene en toda la Unión Europea”, ha señalado la empresa. En el resto de países, la compañía está aplicando “soluciones similares, en línea con la legislación y actuaciones decididas por cada gobierno”.

A lo largo de los últimos dos días, cada vez son más las empresas de moda que han anunciado su intención de presentar un Erte. La primera fue el grupo madrileño Tendam, que ha sido seguido por Adolfo Domínguez y Liwe Española.

Fuentes sindicales señalan que está previsto que a partir del miércoles, tras la publicación en el Boletín Oficial del Estado (BOE) de las medidas económicas decretadas por el Gobierno derivadas del estado de alarma por la epidemia de coronavirus, más empresas apuesten por esta medida.

“La mayor movilización de recursos de nuestra historia democrática”. Así ha definido Pedro Sánchez, presidente del Gobierno, el Decreto Ley aprobado hoy por el consejo de ministros para paliar los efectos del estado de alarma y la crisis del coronavirus. El Gobierno movilizará hasta 200.000 millones de euros, el equivalente a un 20% del Producto Interior Bruto (PIB) del país.

De ellos, unos 117.000 millones de euros serán íntegramente públicos y el restante se complementará con la movilización de recursos privados. “Es un esfuerzo enorme que responde a la magnitud del desafío”, ha señalado Sánchez.

El primer gran bloque de medidas se destina a la protección del empleo. En este sentido, el Gobierno promoverá los expedientes de regulación temporal del empleo (Erte) para “evitar una crisis temporal como la actual tenga un impacto negativo permanente sobre nuestro mercado laboral”.

El Gobierno promoverá los Ertes con la exoneración de las cuotas a la Seguridad Social

En este sentido, los Ertes causados por le coronavirus serán considerados de fuerza mayor y se reducirán los plazos. A las empresas que opten por estas medidas se les exonerará de las cuotas a la Seguridad Social.

“Hago un llamamiento para que tomemos en cuenta estas medidas y no se despida a los trabajadores; el Gobierno les ayudará a superar esta crisis temporal pero seguirán necesitando a sus trabajadores cuando la actividad económica recupere la normalidad”.

Por su parte, los trabajadores podrán cobrar el paro aunque no cubran el requisito de cotización previa y el paro que se cobre en este periodo no se descontará del periodo devengado. Además, los asalariados podrán adaptar o reducir su jornada de trabajo hasta el 100% para conciliar situaciones derivadas de esta crisis.

Sánchez apuntó que las medidas tienen que ser contundentes para que “la salida venga seguida de recuperación y no estancamiento”

Liquidez

El otro gran bloque del Decreto Ley incluye medidas para favorecer la liquidez. “No vamos a permitir que problemas de liquidez se conviertan en problemas de solvencia”, dijo el presidente. En este sentido, el Gobierno establecerá una línea de avales por un valor de hasta 100.500 millones euros, así como programas de apoyo a la digitalización y al I+D para favorecer el teletrabajo.

También se ha reformado la normativa sobre inversiones extranjeras para evitar que empresas de fuera de la Unión Europea “puedan tomar el control de empresas españolas”, aseguró el presidente.

Desde el punto de vista social, el Gobierno destinará unos 600 millones de euros a la financiación de las prestaciones básicas, especialmente para mayores y dependientes, así como una moratoria en los pagos de las hipotecas. “Nadie será desahuciado de su casa por atravesar una situación difícil”, apuntó el presidente.

Igual que insistió en la necesidad de “frenar la curva” de afectados, Sánchez aludió a la misma expresión para referirse a la recuperación: “hay que frenar la caída de la producción y el empleo”.

“Hay que empezar la recuperación en cuanto la emergencia quede atrás, relanzando nuestra economía, producción, dinamismo empresarial y empleo”. En este sentido, Sánchez apuntó que las medidas están destinadas a que “la salida de la emergencia sea una V y no una L, que venga seguida de recuperación y no estancamiento”.

“Es una movilización colosal de recursos públicos -afirmó Sánchez-; pero por sí sola no puede bastar; necesita un apoyo complementario que debe venir del sector privado, para que que todos asumamos la idea de que la crisis es temporal y debe tratarse como temporal”.

Liwe Española acomete también un expediente de regulación temporal de empleo (Erte). La empresa, que opera con la cadena Inside, comunicó ayer un expediente que afecta a 1.900 empleados, el 94% de su plantilla en España, según ha explicado en un hecho relevante remitido a la Cnmv.

La compañía murciana se suma así a Tendam y Adolfo Domínguez, que también han anunciado Ertes en las últimas horas tras el cierre impuesto de tiendas en España. A 31 de diciembre de 2019, la empresa operaba con 394 tiendas en España, 25 en Portugal, 25 en Italia y tres en Grecia, donde aterrizó en 2018. En los cuatro se ha decretado ya el cierre de todos los comercios.

Liwe Española opera con 394 tiendas en España, 25 en Portugal, 25 en Italia y tres en Grecia

“Esta medida se prolongará durante los próximos quince días al menos, aunque es previsible que pueda prorrogarse por un periodo más largo del inicialmente previsto”, apunta la empresa. “Durante el periodo en que esta situación exista en cada país, el cierre de nuestras tiendas es total, por lo que esta paralización de la actividad tendrá un impacto muy significativo sobre los ingresos de la compañía”, añade.

Liwe subraya que está trabajando en áreas que no tienen que ver con la atención en tienda, como aprovisionamiento de materia prima, diseño, tienda online y fabricación.  

Europa toma medidas ante el coronavirus. Mientras que Italia ha destinado 25.000 millones de euros para paliar la crisis, Francia ha explicado que se compromete a asumir el pago de los créditos bancarios contraídos. En España, el consejo de ministros se reúne hoy para tomar medidas ante la crisis.

En Francia, Emmanuel Macron anunció anoche medidas para mitigar el impacto de la epidemia en la economía nacional y en la vida de los ciudadanos. El país destinará 300.000 millones de euros a salvar a las empresas. “Ninguna de ellas debe quebrar debido al coronavirus”, declaró el presidente del país galo.

El Estado francés asumirá el pago de los créditos bancarios contraídos, suspenderá el pago de impuestos y cotizaciones sociales, de las facturas de agua, luz y gas, así como los alquileres. “Ningún francés se quedará sin recursos”, señaló Macron. “Estamos en guerra”, añadió.

“Estamos en guerra”, señaló Emmanuel Macron, presidente de Francia

Italia también ha tomado medidas económicas ante el coronavirus. El Gobierno del país ha puesto en marcha un programa de ayudas, Cure Italia, en el que destina 25.000 millones de euros para ayudar a la industria ante la crisis del coronavirus y generará financiación por 350.000 millones de euros para “empujar a la economía”.

“Confiamos en que Europa y otros estados nos seguirán, aunque somos conscientes de que esto no es suficiente y tendremos que reconstruir la estructura económica y social”, ha señalado Giuseppe Conte, primer ministro de Italia.

El ministro de economía del país, Roberto Gualtieri, señaló que 3.500 millones de euros se destinarán al sistema de salud y protección civil, mientras que 10.000 millones de euros estarán destinados para apoyar el empleo y otros 10.000 millones para ayudar a las familias con hipotecas.

Italia destinará 3.000 millones de euros a los autónomos como protección ante la inactividad

Por otro lado, se destinarán 3.300 millones de euros para el programa casa integrazione, una medida que consiste en el apoyo salarias para las empresas con actividades manufactureras y comerciales con menos de quince empleados. Además, otros 3.000 millones de euros estarán destinados a los autónomos como protección ante la inactividad.

Otros 1.200 millones de euros estarán destinados a garantizar un permiso parental de quince días, mientras el Gobierno también proporcionará seiscientos euros a cada familia para la contratación de una persona que cuide de los niños.  

El Gobierno prepara un batallón de medidas para paliar la crisis del coronavirus. El Consejo de Ministros aprobará hoy un Real-Decreto ley de medidas extraordinarias que incluyen agilizar los expedientes de regulación temporal de empleo (Ertes) y permitir reducciones especiales de jornada, según Europa Press.

En concreto, se configura el derecho de los trabajadores a la adaptación de su jornada laboral y una reducción de jornada especial, que podrá alcanzar incluso el 100% en el caso de que la presencia del empleado sea necesaria para atender a otra persona, entre otros supuestos relacionados con el coronavirus y su prevención.

El Consejo de Ministros contempla flexibilizar los Ertes, definiendo qué se entenderá por fuerza mayor

Según el borrador recogido por Europa Press, también flexibilizarán los Ertes de suspensión o reducción de jornada, definiendo concretamente lo que se entenderá por fuerza mayor en las actuales circunstancias y simplificando los requisitos para su presentación. Las medidas en materia de empleo están en línea con lo demandado en los últimos días por patronales y sindicatos.

En el preámbulo del texto se asegura también que “se habilitarán todos los créditos necesarios”. Entre otras medidas incluidas en la norma se encuentran también la prestación del paro sin cotización mínima a aquellos trabajadores afectados por la actual situación, así como una moratoria en las hipotecas para las personas que hayan reducido sus ingresos o estén en situación de desempleo.

Hasta 1.500 millones de euros menos por cada día que permanezcan las tiendas de moda cerradas. Desde hoy, todas las tiendas que no distribuyan productos esenciales permanecerán cerradas en Alemania como una de las medidas impuestas para contener la propagación del coronavirus. Ante esta medida, la federación alemana de comercio minorista prevé que el retail deje de ingresar hasta 1.500 millones de euros cada día hasta que las tiendas vuelvan a abrir sus puertas.

El director de este organismo, Stefan Gent, ha advertido que muchas empresas de la industria de la moda, electrónica o productos cosméticos ya han registrado caídas de ventas. “Si el cierre dura ocho semanas, el comercio minorista no podrá hacerle frente y habrá insolvencias en las próximas tres o cuatro semanas”, ha dicho el ejecutivo.

Alemania ha vivido un cierre gradual de la vida pública debido a la propagación del coronavirus en el país durante las últimas dos semanas. Allí, los eventos y actos culturales se han cancelado y las escuelas han cerrado sus puertas. Los restaurantes pueden abrir entre las seis de la mañana y las seis de la tarde. 

Con el cierre de comercios, el país se ha sumado a Italia, España y Francia, que han adoptado la misma medida durante los última semana.

Más de 150.000 millones de dólares. Este es el volumen en ventas que se juega la moda sólo en Europa, Estados Unidos y Canadá por la epidemia del coronavirus, según cálculos de WWD y Customer Growth Partners.

La cifra incluye los 68.000 millones de dólares en ventas que registraron las tiendas de moda y los grandes almacenes en Estados Unidos en marzo y abril del año pasado, además de los 82.000 millones de Europa y Canadá en el mismo periodo.

El estallido de la pandemia forzó, en una primera fase, el cierre de las tiendas de los grupos en China, pero en el último mes ha llegado a Europa y Norteamérica, los dos principales mercados para el sector.

En China, las ventas minoristas cayeron un 20,5% en enero y febrero

El primer país en ordenar el cierre de comercios fue Italia, el pasado 11 de marzo. Después se sumó España, el pasado sábado, y Francia, a partir del lunes. Además, gigantes como H&M, PVH, VF y Nike han cerrado también sus tiendas en otros mercados, especialmente en Canadá y Estados Unidos.

En China, donde los comercios ya han comenzado a abrir, las ventas minoristas se hundieron un 20,5% en enero y febrero, en relación al mismo mes del año anterior, según el Instituto Nacional de Estadística del país.

También las bolsas están sufriendo. El Ibex35 se dejó un 20,8% la semana pasada, la segunda peor de su historia, y Wall Street registró el pasado jueves su mayor caída en treinta años, aunque desde entonces ha habido ligeros repuntes.

Adolfo Domínguez, Erte sobre el 61% de la plantilla. La compañía gallega de moda ha activado un expediente de regulación de empleo temporal (Erte) que afectará a los 728 empleados de tienda.

La compañía ha activado esta medida hasta el próximo mayo, en el caso de que el cierre de sus 188 establecimientos en España tenga que prolongarse. Los profesionales de las tiendas del grupo podrán reincorporarse a sus puestos de trabajo cuando la red de tiendas pueda reabrir con seguridad, según ha explicado la empresa.

Adolfo Domínguez ha reforzado su actividad logística en el centro de San Cibrao das Viñas

“La protección de nuestros clientes y profesionales es nuestra máxima prioridad”, ha señalado la empresa. “Reforzamos áreas que nos permitan ser lo más rentables posible hasta el punto que podamos reabrir nuestras tiendas y volver a la actividad habitual”, ha explicado Antonio Puente, director general de la empresa.

El Erte que ha activado la empresa afecta únicamente a los empleados de España, aunque la empresa también ha cerrado sus establecimientos en otros mercados como China, Francia, Perú y Kuwait. El grupo mantiene abiertos otros 186.

En paralelo, la empresa ha señalado que reforzará su venta online para “garantizar el envío de pedidos”. En ese sentido, Adolfo Domínguez ha optimizado la actividad de su centro logístico en San Cibrao das Viñas (Ourense) para reforzar el servicio a sus clientes online.